Tenemos la ecuación x−1=x x−1=x Elevemos las dos partes de la ecuación a la potencia 2 x−1=x2 x−1=x2 Transpongamos la parte derecha de la ecuación miembro izquierdo de la ecuación con el signo negativo −x2+x−1=0 Es la ecuación de la forma
a*x^2 + b*x + c = 0
La ecuación cuadrática puede ser resuelta con la ayuda del discriminante. Las raíces de la ecuación cuadrática: x1=2aD−b x2=2a−D−b donde D = b^2 - 4*a*c es el discriminante. Como a=−1 b=1 c=−1 , entonces
D = b^2 - 4 * a * c =
(1)^2 - 4 * (-1) * (-1) = -3
Como D < 0 la ecuación no tiene raíces reales, pero hay raíces complejas.